Mañana
Mañana es el día de las promesas.
El refugio de la pereza.
El amparo del que debe.
El consuelo del que sufre.
El temor de los que son felices.
Mañana es un día muy lejano.
El más lejano de todos.
Es el día que viene después del ultimo día.
Mañana es el día de las promesas y de los
propósitos.
Plazo constantemente abierto a nuestras
necesidades, a nuestras debilidades,
a nuestras penas y a nuestras alegrías.
Mañana es un día inagotable.
Es la salida de todos los apuros.
Es el día en que se hará todo aquello que
el hombre se ha propuesto no hacer.
Mañana es un día que circula entre los
hombre como un pagaré sin fecha.
Mañana es una ilusión cuya realidad es hoy.
Mañana es un temor, un deseo, una esperanza.
Mañana no existe, porque siempre estamos en
hoy.
Por más que ha dado el tiempo, no ha podido
fabricas más que un día hoy.
En cambio los hombres han podido hacer un
día de mañana.
Si los grandes sabios, los grandes
artistas, los grandes políticos, los hombres de ciencia, hubiesen dejado para
mañana el pequeño detalle que podía ser el corolario de su obra, la humanidad
estaría en mantillas, y ninguno de los grandes y útiles inventos que han
transformado nuestro siglo, habilitándole para nuevas eras prosperas, habrían
acaecido.
Solamente debemos pensar en mañana para
estimularos en mejorar nuestra personalidad.
Para advertir que debemos ser mejores que
ayer y más activos, perseverantes, amables y abnegados que hoy.
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